El día 14 de setiembre falleció Patrick Swayze de un cáncer de páncreas.
El actor y antiguo bailarín será conocido sobre todo por Dirty Dancing y su papel de Johnny Castle un profesor/animador de baile en un residencial de vacaciones.
Esta película encarna como pocas el espíritu ochentero que marcó nuestra juventud cinéfila. Pero si yo lo recuerdo por algo es por su papel en la serie televisiva Norte y Sur. Cuantas noches me escondí para ver las aventuras de los dos amigos durante la guerra de secesión.
A pesar del carácter de superestrella que ya tenía supo sobrevivir a la purga de los 90.
Esa década supuso para casi todos los actores de su generación, denostados por sus películas, el término ochentero que se convirtió casi en una expresión peyorativa.
Curiosamente ahora en el siglo XXI se han recuperado para el cine y la televisión a gente como Matt Dilon o Rob Love en magníficos trabajos (Crash o El Ala Oeste)
En los 90 llegó a lo más alto con dos películas excelentes: Ghost y A Won Foo que era una revisión muy digna de la excelente Priscila, reina del desierto.
Recuperó su alo de guaperas con carácter en la gran Le llaman Bodhi y consiguió buenas críticas por la inclasificable Donny Darco, donde interpretaba a un telepredicador, a partir de ahí una sucesión de malas elecciones y problemas personales arruinaron su carrera y su cuerpo.
Pero lo que es cierto es que Patrick Swayze es para siempre ya una parte inolvidable de la personal historia del cine para muchos, incluido yo mismo.
Sigue bailando.
Por culpa de las vacaciones esta noticia del 14 de septiembre aparece hoy, mil perdones Elisa.
1 comentarios:
Si no vi esta película 20 veces no la vi ninguna, y aún así cada vez que oigo esta canción o veo el video me emociono. En su momento me sabía hasta los diálogos je je. Descanse en Paz.
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