Sharon Stone....

Sharon Stone ha aparecido de esta guisa en la famosa revista Paris Match con el lema: Tengo 50 años ¿y que?

"Si alguien se sorprende por estas fotos, es una reflexión de su propia mirada sobre la edad y es él quien se tiene que preguntar por esa actitud” . Ha dicho en el interior.

La verdad es que viéndola, madre de tres hijos, no es de extrañar que sea portada.

Lo que sigo sin entender es como aún hay mujeres que se plantean combinar lo imposible, botox y actuación.

La culpa, claro, no es de las actrices. Nadie le pide a Robert de Niro que este bueno, ni a Pachino, que parece mi abuela con ese pelico que trae ultima mente, que enseñe palmito.

Pero excepto a unas pocas actrices, Meryl Streep o Helen Mirrel, pocos papeles quedan para las no perfectas y jovenes.
Porque perfectas hay, Demi Moore (47 años) o Sophie Marceau (43) son mujeres bellísimas pero tienen mas de 25 y mayores para lo que estamos acostumbrados.

Una costumbre que es tan absurda pero tan arraigada que nos hace natural ver parejas como estas.

En Ronin, una excelente película, Robert de Niro (66 años) se liga a Natascha mcElhone (38).
En 88 minutos Al Pacino (69 años) tiene como amante a Alicia Witt (34 años) y en ningún momento se hace referencia a la clarísima diferencia de edad.

El mismo referente pero a la inversa sería que Meryl Streep (60 años) saliese en una película con Robert Pattinson (23) y me temo que eso sólo es posible en el remake de El Graduado.

¿Por qué ocurre eso? porque la media de edad de las actrices más taquilleras ronda los 28 años y la media de edad de los mejor pagados (hombres) es de 47 años como poco. Brad Pitt (46 años) Tom Cruise (47 años) o George Clooney (48 años)Johnny Deep (46 años) Tom Hanks (53 años) Keanu Reeves (45 años)

Esto de pensar que podrían todos ellos ser los padres de sus parejas cinematogáficas me da muy mal rollo.

Intentar ser siempre joven no es el camino, los personajes más interesantes NUNCA son jóvenes.

Los viejos inexpresivos nunca enternecen, a menudo provocan risa. Pero Katherin Hepburn, devorada por el Altzheimer, con un rostro surcado por mil cicatrices da una lección de cómo se actúa en la preciosa El Estanque Dorado. Julio Iglesias, por contra, da miedo.

En una época donde Megan Fox (23 años) es el paradigma de la belleza....yo me quedo con la abuela de 51.

Un saludo y que aproveche.